Un elemento arquitectónico en desuso

Todos sabemos que utilizar un sistema de polea multiplica la fuerza y nos permite alzar cosas pesadas con menos esfuerzo. Hoy en día, aún podemos observar en edificios antiguos sobresaliendo de la fachada, una simple viga saliente, encima del último piso. Debido al difícil acceso por las escaleras, su estrechez, o al volumen de los objetos se utilizaban para poder subirlos hasta el piso deseado.

Actualmente, creo que las ordenanzas municipales prohíben subir muebles mediante poleas por la fachada. Hoy en día, la grúa elevadora ha sustituido al sistema de polea. Las grúas elevadoras son vehículos formados por un sistema mecánico de escaleras extensibles y motorizadas, mediante el cual se pueden alcanzar grandes alturas para manipular mobiliario y prácticamente sin esfuerzo.