Palau Güell

Un palacio urbano para el mecenas de Gaudí

Si una palabra puede definir este palacio diseñado por Antoni Gaudí i Cornet, construido entre 1886 y 1890, seria ostentación. La obra es un encargo de su amigo y mecenas Eusebi Güell i Bacigalupi, que quería una vivienda funcional que se adaptase, por un lado, a las necesidades de la vida privada de su familia, y por otra, a la intensa vida social que llevaban a cabo. Si hoy en día ya sorprende por su opulencia, a finales del siglo XIX no dejaría indiferentes a sus visitantes, a la vez que da constancia del poder económico de la familia Güell.

Es uno de los primeros trabajos de la carrera de Gaudí, pero ya se aprecia la innovadora concepción del espacio y de la luz del arquitecto, y la creación de propias formas expresivas fruto de su prodigiosa imaginación utilizando materiales tradicionales: piedra, madera, hierro forjado, cerámica, vidrio, etc.

En 1945, es cedido por los herederos de la familia Güell a la La Diputació de Barcelona, su actual propietaria, que después de un largo y laborioso proceso de restauración, lo abrió al publico en el 2011. Gracias a no haber sufrido nunca modificaciones esenciales y a su restauración lo podemos ver prácticamente como la concibió Gaudí.

Particularmente la visita me sorprendió gratamente. Con la entrada te proporcionan un folleto explicativo que incluye un plano de todas las plantas del edificio, lo que te permite ir a tu aire y tomarte el tiempo necesario en apreciar todos los detalles. También tienes la posibilidad de descargarte una útil app en el móvil, que te va facilitando explicaciones, anécdotas e historias de cada uno de los espacios y estancias. Solo deciros que una visita programada por la app de poco más de una hora, se alargo en mi caso más del doble de tiempo. Cierto que al ir tomando fotografías pierdes un poco la noción del tiempo, vuela sin darte cuenta. Si sois aficionados a la fotografía, es un espacio muy fotogénico, como todas las obras de Gaudí, sobre todo los exteriores, el interior es más complicado por las dimensiones de los espacios y la luz.

En 1984 es declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, y con anterioridad, en 1969 monumento histórico-artístico por el Estado español.